Yasky: “Si Macri veta, hay paro nacional”
Organizaciones sociales, políticas, sindicales, clubes de barrio, cooperativas y multisectoriales realizaron un acto frente al Congreso para repudiar los tarifazos de luz, gas y agua.
Organizaciones sociales, políticas, sindicales, clubes de barrio, cooperativas y multisectoriales realizaron un acto frente al Congreso para repudiar los tarifazos de luz, gas y agua.
La jornada nacional de lucha para frenar el tarifazo, de la que participaron ambas CTA, Camioneros, la Corriente Federal, entre otros, tuvo lugar en el marco de la discusión en el Congreso de la Nación de una ley que frene las subas de los servicios públicos y retrotraiga los importes a diciembre de 2017. El proyecto de ley fue presentado por diputadas y diputados de la oposición.
El diputado nacional por la provincia de Buenos Aires, por Unidad Ciudadana, y secretario general de la CTA de los Trabajadores, Hugo Yasky, expuso los argumentos para frenar los tarifazos que golpean al conjunto de la clase trabajadora.
“En primer lugar hay que rescatar el hecho absolutamente positivo de que varios bloques hemos asumido la responsabilidad de tomar un tema que hoy significa un drama en muchos hogares argentinos, un drama en muchos pequeños comercios, un drama en muchas pequeñas empresas.
Acá no hay una división entre buenos y malos. En este momento hay una clara división entre los que queremos un país viable para las mayorías populares, un país donde la riqueza se distribuya, un país donde el que se lleva la plata sin aportar al Estado tenga que pagar las consecuencias, un país sin hijos y entenados, y un país con justicia social. Esa es la discusión. Las tarifas así como están planteadas son absolutamente inviables. Hay un 20%, un 30% que hoy puede estar disfrutando de esta situación. Esos son los que tendrían que hacerse cargo de admitir que no se puede vivir en un país con el 70% excluido.
Hace poco, con compañeros del movimiento sindical que también están acá acompañando, Pablo Moyano, Omar Plaini, miembros de la CGT, estuvimos recordando la semana pasada, el 27 de abril, aquella huelga que fue la primera huelga que encabezó Saúl Ubaldini contra la dictadura militar. Dictadura militar que en este país dejó un saldo de destrucción enorme, destrucción de miles de vidas, casi todas ellas trabajadores y trabajadoras, destrucción de la industria, persecución a luchadores populares. Esa dictadura fue enfrentada por la clase trabajadora y por el movimiento popular. No vimos a los que hoy están haciendo una especie de cerco protector de este gobierno, me refiero a la convergencia empresaria, me refiero a AEA (Asociación Empresaria Argentina), los herederos de José Alfredo Martínez de Hoz. No los vimos sacando el pecho en defensa de la democracia, no los vimos condenar la miseria en la que estaba sumido nuestro pueblo, no los vimos firmar ninguna solicitada por los asesinados de distintas fuerzas políticas, la mayoría de nuestro movimiento, el peronista, pero también compañeros y compañeras radicales, compañeros y compañeras de la izquierda, cientos, decenas de miles, de argentinos. No los vimos ahí.
Y cada vez que en este país hubo una crisis como la que nos va a llevar esta zambullida en el Fondo Monetario Internacional, cada vez que en este país hubo crisis, no ganaron los buenos y perdieron los malos, o viceversa. Ganaron los que estaban en la cúpula de la clase dominante y perdimos los que formábamos parte del pueblo. Los jubilados, los trabajadores, las maestras, los profesionales, los médicos, los enfermeros, los obreros industriales, los obreros del transporte. Esos siempre perdemos.
No hay en el estallido del año 2001 una lista de empresarios caídos en las movilizaciones callejeras. Siempre somos los mismos. Por eso no queremos que nos lleven a ese desfiladero. Por eso somos los primeros que vamos a defender la democracia. Por eso somos los primeros que les decimos no venimos a desestabilizar a nadie. Venimos a hacer viable la vida de una inmensa mayoría de argentinos. En este momento hay 500 mil millones de dólares depositados en el exterior. Cuando nos decían que había que favorecer al mercado y las políticas de mercado, porque entonces se acumulaba riqueza, y que la riqueza acumulada un día desbordaba la copa, bueno, hay muchos argentinos sentados abajo de una copa de 500 mil millones de dólares, que se la llevaron afuera, que está en los paraísos fiscales. Y los socios del gabinete de Mauricio Macri y el propio Mauricio Macri y las empresas de energía que están asociadas son los que llevan esa plata del país.
Entonces, esto es un proyecto razonable. No se habla de congelar, no se habla de poner precios. Se habla de hacer viable el aumento de las tarifas, de acompasarlo con el salario, de permitir que el que trabaja, que el jubilado, puedan llegar a fin de mes, que no haya esta angustia que existe ahora. Y yo le pido a la oposición que hoy se unió, que mantengamos este camino. Y le pido al oficialismo que no reaccione corporativamente como si el mandato que tuvieran fuera defender a los grupos empresarios, que escuchen la demanda de nuestro pueblo, que recuerden la raigambre de historia popular de la que vienen, la Argentina es un país distinto. No es Colombia, no es México, no es Perú, no es Paraguay. En el siglo XX tuvimos dos grandes epopeyas populares. La de 1918 con la reforma universitaria que fue un gran movimiento popular, y la del 17 de octubre de 1945 y desde entonces nunca la clase dominante pudo someter a la ley del que más tiene y más puede al pueblo argentino. Desde entonces no nos pudieron doblegar, desde entonces, cada vez que se interrumpió la democracia, no fue el pueblo argentino el que la interrumpió, fueron aquellos que desde la clase dominante intentaron imponer las condiciones para el hambre y la miseria de nuestro pueblo. No vuelvan por ese camino, no cometan dos veces el mismo error. Tenemos el deber de dar una respuesta en el marco de la democracia y hoy lo que vamos a votar acá, si el presidente de la Nación es inteligente, lo tiene que tomar como un aporte de la oposición para enmendar la situación en la que nos hundieron. Y les digo: No es demagogia hacerse cargo de un problema que es una herida abierta. Demagogia es haber hecho campaña electoral diciendo que no iba a haber aumento de tarifas, diciendo que se iba a respetar lo que estaba bien, diciendo que iba a haber pobreza cero viendo, diciendo que se iba a tomar políticas para distribuir”.
Mientras que en la calle, en un escenario montado frente al Congreso, Hugo Yasky ratificó su exposición en el recinto de la Cámara de Diputados.
“Acabo de decirles a todos los que quieren defender el tarifazo que hay una clase trabajadora, que hay un movimiento sindical que va a dar la lucha en la calle, en la movilización y que vamos a derrotar a los que quieren jugar con el hambre de nuestro pueblo. Los bloques de la oposición tenemos mayoría para votar una ley que frene el tarifazo. En este momento es clave la unidad, esta unidad en la calle, el sindicato de Camioneros, Canillitas, los compañeros La Bancaria, la Corriente Federal, las regionales de la CGT, los movimientos sociales, las CTA. Y es también fundamental la unidad allá adentro, porque esta mayoría la construimos con la suma de cinco bloques que por primera vez desde la ley antidespidos estamos votando a favor del pueblo, y esto es muy importante.
De acá la ley va a ir al Senado, y el día que vaya al Senado, otra vez en la calle movilizados para que el Senado apruebe también la ley contra el tarifazo
Acá dijeron varios de los diputados oficialistas que si la ley se aprueba finalmente el presidente de la nación la va a vetar, como a la ley antidespidos.
Si Macri veta la ley, hay paro general.
Vamos a estar en las calles.
¡Fuerza compañeras! ¡Fuerza compañeros!”.